El cine siempre ha estado lleno de coches alucinantes, como los Aston Martin de James Bond, el DeLorean de Regreso al futuro (que por cierto está en España) o el Coche Fantástico (sí, lo sé, este no es del cine sino de la tele, pero es que me encanta este coche ). Todos incluyen sofisticadas tecnologías que permiten hacer cosas increíbles a sus conductores.
Podemos estar razonablemente seguros de que no conseguiremos ver funcionando al mítico condensador de fluzo (menuda traducción del inglés hicieron…), pero parece que poco a poco algunos de los aspectos de la ficción se van convirtiendo en realidad. Y es que los coches de la actualidad son cada vez más inteligentes, gracias a los avances en sistemas operativos para vehículos.
Lo último nos llega a través del WSJ, que nos cuenta las iniciativas del Departamento de Policía de Nueva York en su plan estratégico NYPD2020. Algunas de ellas serán de gran ayuda a los agentes que patrullan por la Gran Manzana y ya han sido probadas en un prototipo en Brooklyn. Estos coches estarán permanente conectados, lo que les permitirá que todo lo que ven y perciben con sus cámaras y sensores sea enviado en tiempo real a la central, en donde podrán procesar la información en bruto (por ejemplo mediante reconocimiento facial), y enviar información a los agentes sobre criminales o situaciones que requieran su actuación.
Estos coches incluirán sensores que detectarán la presencia de contaminantes peligrosos o radiación, antes de que los policías hayan salido siquiera del coche. También irán equipados con lectores infrarrojos de matrículas, que avisarán al instante a los agentes si se cruzan con un vehículo robado, relacionado con crímenes o en la lista negra de infractores.
Cuando estos sistemas sean integrados, habrá miles de patrulleros recopilando información por toda la ciudad. Seguro que en la NSA ya se están frotando las manos pensando en esto.
Vía: Wall Street Journal