Refe y Susan Teme son dos padres muy imaginativos que han vuelto a demostrar que no hacen falta consolas, móviles y televisión para conseguir que sus hijos se diviertan y pasen momentos mágicos. Todo comenzó en noviembre de 2012. Por la noche cogían a los dinosaurios de plástico de sus hijos y los ponían en situaciones divertidas y caóticas para que los niños los vieran por la mañana. Lo que empezó como una simpática broma se convirtió en tradición que se mantuvo durante todos los días del mes, al que han bautizado como Dinovember.
Los niños se pasaron todo el año hablando de sus fantásticos dinosaurios y sus correrías nocturnas. Los padres repitieron el proyecto al año siguiente y han creado una página de Facebook que ya cuenta con más de 250.000 fans. Tienen cientos de fotos, así que aquí os traemos algunas de las más simpáticas, incluyendo los comentarios que han hecho los propios padres sobre ellas.
Todo empezó de forma sencilla. Los niños descubrieron al despertarse que los dinosaurios habían cogido una caja de cereales y habían liado un follón en la mesa de la cocina
La siguiente mañana treparon a la despensa para robar un bol de fruta
Al día siguiente consiguieron abrir la nevera y hacerse con un cartón de huevos. Los niños susurraban «Oh, oh… A papá y mamá no les va a gustar nada esto…»
«No dejes que papá y mamá vean esto. ¡Los dinosaurios han pintado la pared!»
«¡El jarrón favorito de mamá!»
De vez en cuando limpiaban
La mayoría de las veces, simplemente les gustaba pasarlo bien
Ningún juguete está a salvo
Me encanta la explicación que hacen los padres sobre sus motivaciones para currarse algo tan bonito:
¿Por qué hacemos esto? Porque en la época de los iPad y Netflix, no queremos que nuestros niños pierdan su imaginación y su capacidad de asombrarse. En un tiempo en que todas las preguntas se responden buscando en internet, queremos que nuestros pequeños experimenten un poco de misterio. Todo lo que cuesta es algo de tiempo, energía, creatividad y unos cuantos dinosaurios de plástico.
La infancia es fugaz, así que asegúrate de que es divertida mientras dure.
¿Y tú? ¿Te animas a hacer algo así en tu casa que tus hijos puedan recordar toda su vida?
Vía: Refeup