Perder la posibilidad de ver es sin duda una de las peores cosas que le puede pasar a cualquiera. Las investigaciones para conseguir devolver la vista a muchos invidentes no cesan y en el video de abajo podemos ver un momento muy bonito que ha sido posible gracias a los avances que se han conseguido en este campo. Con un implante eléctrico u ojo biónico, Larry Hester ha conseguido ver luz por primera vez en 30 años.
No es ver como todos entendemos ver, pero sí es poder identificar que hay luz o no, y dónde está esa luz… eso ayuda a ver puertas, ventanas, muros, algo que sin duda ayuda mucho a mejorar su nivel de vida y autonomía. Es un primer paso muy importante que consigue que algo que era ciencia ficción hasta hace poco tiempo, ahora sea una realidad. Los siguientes pasos consisten obviamente en mejorar las capacidades de estos implantes para que puedan ver más cosas.