Sorpresa (y de las gordas) en el sector tecnológico. Lenovo ha comprado Motorola Mobility, la empresa que Google compró hace poco menos de dos años por 12.000 millones de dólares. La compañía asiática se queda con el fabricante de móviles por solo 2.910 millones de dólares. Una cuarta parte.
Google, eso sí, mantiene las patentes de Motorola, pero no parece que éstas valgan esos más de 9.000 millones de diferencia. En los 19 meses que ambas compañías han trabajado juntas se ha reducido considerablemente el número de terminales disponibles, dando como resultado el Moto G y el Moto X como principales novedades.
Esta adquisición se anuncia pocos días después de conocerse el acuerdo entre Google y Samsung por el que cada compañía podrá utilizar patentes de la otra durante un periodo de 10 años. Una relación en la que, como vemos ahora, se hacía innecesaria (o incómoda) la presencia de Motorola.
No es la primera vez que Lenovo adquiere una empresa (o parte de ella) estadounidense de renombre. En 2005 se hizo con la división de ordenadores personales de IBM, manteniendo el diseño de los equipos.
Vía: Re/code