Los chicos de Slow Mo nos vuelven a deleitar con un nuevo video de una cámara súper-súper-súper-lenta: un disparo bajo el agua a 27.000 fotógrafas por segundo.
Impresionante… para poder grabar algo así, no obstante, hacen falta varias cosas difíciles de conseguir; una cámara muy rápida grabando vídeo, una pistola, y una piscina vacía en donde poder disparar el arma y que sea lo suficientemente grande como para que el proyectil se ralentice lo suficiente como para parar contra algo sin estropear el muro