Si te gustan los coches teledirigidos o radio control, te gustará mucho este vídeo de los chicos de SloMo en donde podemos ver cómo le hacen todo tipo de cosas malas a un coche radiocontrol de competición, capaz de correr a más de 160 Km/hr, una velocidad increíble para un juguete de este tipo, que obviamente, sólo se utiliza a nivel profesional. En el vídeo, podemos ver cómo lo estrellan, queman, le hacen atravesar una montaña de harina… y por último, lo hacen chocar contra otro coche similar, grabándolo todo en una espectacular cámara lenta que te dejará con la boca abierta.